Debo confesar que en este trabajo comienzas a tener cierta relación con las personas famosas. Y he aprendido que mientras más famosas más tranquilas, educadas, agradables y respetuosas son. He tenido la oportunidad de conocer y tratar con personas que admiro y respeto y he aprendido que las celebridades son personas normales y corrientes que utilizan el avión como un medio de transporte; en el cual trabajan, leen o simplemente descansan de su rutina.
El problema está en las mal llamadas "celebridades locales"; el típico actor o animador de televisión local que piensa que porque viaja en un avión; normalmente en clase económica, tiene derecho a tener un servicio de Primera Clase simplemente porque sale en algún programa que no veo porque desde que existe la televisión por cable la televisión local sirve solamente para acompañarme en la hora del almuerzo (y eso porque el televisor de la cocina de mi casa es de antenita de paticas)
Me da risa porque este tipo de personas aborda el avión queriendo hacerse notar a como de lugar. Hablan durísimo por su teléfono móvil sobre su contrato en Miami o hacen chistes para que el resto de los pasajeros y uno mismo se ría, o entran al avión estampando besos y estrechando manos como si fueran un político en plena campaña presidencial. Siempre me ha molestado la gente que trata de llamar la atención y con éste tipo de personajes me divierto infinitamente. Sencillamente les doy un trato totalmente neutral y eso parece que los vuelve locos. Es divertidísimo ver como intentan por todos los medios llamar tu atención y la del resto de los pasajeros. Pero hijo... no estás en una feria de un pueblo en el que la gente se va a impresionar con verte. Ni mucho menos estás en el Festival de la Orquídea de Sábado Sensacional. Estás en un avión, pagando el mismo pasaje que todos y aceptémoslo: la mayoría de la gente que viaja en un avión en un vuelo internacional tampoco ve televisión local.
En una oportunidad una Señora (porque sin los kilos de maquillaje es lo que es) narradora de noticias del mundo del espectáculo, en un canal local venezolano armó un escándalo terrible en un vuelo simplemente porque quería otra cobija y no habían más. Le expliqué que era una por pasajero y ésta mujer entró en una ira que yo no daba crédito a lo que pasaba. Dijo que ella merecía algo más que ese "fieltro asqueroso" que daban en turista y que quería una de Primera Clase porque sabía que sobraban. Supongo que éste tipo de personajes no entienden lo que significa "no". La mujer armó un escándalo en el avión diciéndome "¿tú no sabes quien soy yo?" ... la verdad no tenía ni la más mínima idea y simplemente le dije "no, disculpe no sé quién es usted". Más vale que no, aquella mujer ardió en furia y comenzó a despotricar absolutamente todo lo que había en el avión y a mi persona. Yo simplemente decidí ignorarla y eso parecía hacerla enfadar más. Nada peor para una persona con delirios de grandeza que ignorarla. Fue tanto el escándalo que armó que todos los pasajeros la veían con cara de WTF!.
Finalmente sucedió lo que normalmente sucede en estos casos. Un pasajero se paró y le dijo "toma mi cobija a ver si así de una buena vez te callas" la gente comenzó a reírse y la mujer sencillamente se quedó muda de la impresión. Darte cuenta que no eres una celebridad querida y que estás haciendo el ridículo debe doler profundamente en el ego. La próxima vez que vueles ponte una gorrita que te identifique como celebridad local... Capaz obtienes un trato especial.
Felices vuelos!
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